Después de estos dos tweets míos, rebotados cientos de veces, siento el
impulso de escribir una carta al Consejero Delegado del banco del que soy
cliente.
Aquí tenéis copia. Por favor, comentad lo que opináis de esto.
Dopo questi due miei tweets, rilanciati centinaia di volte, sento l’impulso di scrivere all’Amministratore Delegato della banca di cui sono cliente.
Dopo questi due miei tweets, rilanciati centinaia di volte, sento l’impulso di scrivere all’Amministratore Delegato della banca di cui sono cliente.
Ecco una copia. Per cortesia, commentate ciò che ne pensate.
¿Dónde puedo firmar la carta? Pues estoy de acuerdo, desde la primera coma hasta el último punto.
ResponderEliminarSaludos.
Aurelio Méndez - A Coruña
Admito que haya excepciones, sin embargo no veo a banqueros de aquí ordenar a sus entidades que suspendan cobro de deudas porque ha llovido de más. ¡Ojalá me equivoque! No recuerdo que haya ocurrido alguna vez. A lo mejor es un problema cultural, más que de conciencia...
ResponderEliminarMe encanta su claridad coherencia.
Adela Payán
a los bancos que se ocupaban de las personas en cuanto a que son personas se les llamaba cajas, ocupadas en reinvertir en las personas lo que las personas le daban. Pero las cajas se convirtieron en otro parlamento, otro congreso donde pelearse entre colores políticos. Maldita nuestra suerte.
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